Asimismo, habló sobre la decisión de incursionar en la educación tecnológica, donde resaltó datos que demuestran que pese a la universalización para el ingreso de una educación terciaria, Ecuador, en 2020 tuvo una tasa de ingreso del 48% muy por debajo de otros países del Cono Sur: «En la UTE creemos que la política pública y de las universidades, no puede estar sustentada exclusivamente en el incremento de las plazas en las tradicionales carreras universitarias de grado, que por la escasez de cupos o por sus elevados costes económicos dejan por fuera a un importante sector de la población (…) El mercado laboral requiere de una amplia gama de profesionales en los distintos campos del conocimiento».

«La creación de una oferta tecnológica garantiza la implementación de una oferta académica altamente calificada en un entorno en el que dialogan y conviven la formación en todos sus niveles, protegiendo el derecho de los estudiantes, muchos de ellos de escasos recursos económicos, de acceder a una educación de calidad y del sector empresarial de contar con profesionales altamente cualificados en corto plazo», indicó.

Además, explicó que la carrera vinculada a la formación en el campo tecnológico de la nueva escuela será, la de Desarrollo de Software: «La pandemia ocasionada por la COVID-19 nos obligó a transitar hacia una acelerada virtualidad, no sólo en el ámbito educativo, sino también en las distintas esferas de producción. Se ha estimado que en América Latina el 40% de las principales empresas utilizarán servicios de gobierno asistidos por la Inteligencia Artificial lo que aumenta la demanda de profesionales en este campo».